lunes, 26 de julio de 2010

Adoro aquella historia.


Empieza un día, pero en ese día algo cambia le presentan a alguien, algo normal podréis pensar, pero no, algo en èl le decía algo, según èl había sentido algo en el corazón y te entera que va a luchar por ella, entonces empiezan a hablar más y más con èl, le apetece conocerle, como va a ser , y luego un día por algunas cosas èl decide parar, frenar y pasar de ti, y ella en el fondo intenta no perder el hilo que estaba creciendo porque le fastidia pensar que puede llegar a perderle, intenta día a día que no se marche, y poco a poco decide cogerlo, agarrarlo con fuerza y no soltarlo por muchas cosas que sucedan o que le digan, y van pasando los días y cada vez esta en verdad más unida a èl, hasta que cuando se conecta le apetece que este èl, y un día como con quien no quiere la cosa, se ven un simple hola y dos besos, y comenzó la tarde, èl parecía que no estaba ahí, parecía que yo que se, estaba navegando con otro mundo, alomejor entre otras historias, alomejor entre cualquier princesa del reino, y empieza a pensar, en que ojala le mirara algo, le dirigiera la palabra, pero se da cuenta de que no, de que cualquier esfuerzo para acercarse algo más a èl es inútil, y pierde las esperanzas en imaginar que puede que se halla colado por ella, ah saber piensas, imposible tal vez, pero tiene a un pequeño angelito que le da fuerzas, le dice que antes de venir se le veía muy nervioso, que era normal, que ella estuviera tranquila, pero hasta que no pasaron al menos 2 días y aun sin parar de hablar con èl, y le suelta de repente que había estado todo el rato pensando en ella, y se da cuenta de la felicidad tan grande que siente su cuerpo, el leer esas palabras y como chillar de alegría por dentro, en creer, pensar, imaginar, que lo tiene delante y le dan ganas de verle, abrazarle, besarle..
Y un día en el que èl ni se lo podría pasar por la cabeza comienza a jugar a un juego con su mejor amigo, le vendan los ojos, empieza a hacer un video, el diciéndole me esta costando respirar, y el contestando ni que te estuviera matando, de repente se le quita aquella venda, y aparece alguien, algo que èl ni imaginaba, y un abrazo llego a todo, y siguió la tarde, tantas risas, momentos de locura, y momentos de morirte de ganas, terribles, inmensas de querer abrazarlo con fuerza pero le da miedo, lo tiene al lado y se enfada con èl para que le hiciera mas caso, hasta consigue que se ponga a su lado, y pasa el rato y se han cojido de la mano, se sienta en sus piernas y siguen aun abrazados sin cesar..
Después se quedan solos, y ¡FUM! momento de magia puede? quien sabe, en la noche, por ahí que no pasaba mucha gente, las cosas tranquilas y le tenia enfrente. Medio abrazados, cojidos de la mano, picándole y el viniendo detrás, y ese beso, desesperado, enorme, con fuerza, ternura y amor, todo por todo lo que lo han esperado las ganas que tenían de que sucediera y se siente orgullosa y es feliz de que haya pasado, y sigue pasando el rato el tiempo pasa volando de repente le dicen que son las 8 menos cuarto, que las 9 menos algo, o casi las 10.
Que más dará una simple bronca si ha aprovechado durante todo el resto del tiempo? y siguen ablando tan tranquilamente con mucha más intensidad que antes, se da cuenta que se siente de lo más feliz que puede existir, y otra vez se ven, se abrazan, sienten la fuerza del viento, en lugares bonitos, cerca del agua, con los patos haciendo esos ruidos, picándose cada dos por tres ella más que èl, porque el no aguanta menos de un minuto sin mirarla, o porque da dos pasos simulando que esta enfadado se gira y vuelve hacía ella, porque se preocupa cuando comienza a tiritar se quita su chaqueta y se la pone por encima, pero ella tan cabezota quiere que se la quede èl, para que no pase frió por su culpa, y comienzan a pelear, los patos siguen nadando por el lago, los perros hasta se muerden, se acercan a dar de comer a sus pequeños amigos al lago, y como una pequeña enana les tira la comida que había en la bolsa observando como vienen hacia ella, siendo feliz de tener al lado a quien quiere, y tener a una banda de patos alrededor, y sigue trascurriendo la tarde, el le sigue abrazando más y más para que no tenga frió, se sigue riendo, sigue feliz, mordiéndose, besándose, abrazándose, ablando y estando tan tranquilos, y son esos momentos donde recuerda y piensa con quien quiere estar o simplemente merece la pena pasar su tiempo.

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